Solo hace falta el propio cuerpo y un móvil para hacer sexting. Esto es, enviar mensajes, fotos o grabaciones eróticas o sexuales captadas por uno mismo a otra persona a través del teléfono o Internet. Pero expertos/as en nuevas tecnologías y sexología advierten de que tiene importantes riesgos. Una vez se ha enviado el material, el dueño pierde el control, y se abre la posibilidad de que se difunda de manera masiva.
22/09/2012, El País << VER NOTICIA
padding-bottom: 0px;
No hay comentarios:
Publicar un comentario